Autor Dr. Ignacio Casas Fraire, Director General Mexiworld And Logistics En la agenda internacional el agua es uno de los temas más importantes a tratar. Su uso, inadecuado constituye uno de los temas de mayor atención para el desarrollo sostenible a nivel mundial, por su importancia en los ecosistemas y la biodiversidad. El agua está relacionada con la salud, el bienestar y la seguridad alimentaria de las personas, así como el desarrollo industrial, socioeconómico y la calidad del ambiente, los cuales dependen del adecuado manejo y gestión de este recurso no renovable (UNEP, 2004).
En los años 90 se introdujo un concepto denominado “Agua Virtual” cuyo propósito consistía en tratar de contabilizar el agua consumida en el proceso de producción de un producto, principalmente agrícola y agregársela al producto final. Agua que se refería no en el sentido real, sino en forma virtual y que no se veía reflejado en el producto como tal (Hoekstra, 2003).
El concepto fue usado originalmente por John Anthony Allan del King’s College de Londres y de la Escuela de Estudios Africanos y Orientales, al estudiar países con déficits de agua. El concepto podría representar una medida más exacta del flujo de agua entre países, porque toma en consideración toda el agua que a pesar de no estar presente realmente, podía añadirse virtualmente a los productos de importación y exportación, especialmente a los productos agrícolas, y hacerse “visible” en ellos a partir de estimaciones apropiadas (Parada 2012). Aquí nace otro concepto denominado “huella del agua” o “huella hídrica”.
Se emplean dos metodologías para cuantificar el agua virtual de un producto. La primera toma en consideración el agua que realmente fue empleada para la elaboración del producto. La cuantificación del “agua virtual” en este caso dependerá del lugar donde se produjo, del momento en que se produjo y de la eficiencia en el uso del agua. Esto debido a que los requerimientos de agua para producir un kilo de trigo en un país árido pueden ser tres o cuatro veces mayores que los necesarios para producir la misma cantidad en un país húmedo (Hoekstra, 2003).
La segunda metodología consiste en cuantificar la cantidad de agua que se hubiera utilizado para elaborar el producto en el lugar donde se consumirá. Esto servirá para responder a la interrogante acerca de cuánta agua se ahorra un país o región si decide importar un producto determinado en vez de producirlo localmente.
En cuanto a la huella del agua es una medida de la apropiación de los recursos de agua dulce por parte de las personas y tiene tres componentes: azul, verde y gris:
El componente azul se refiere al consumo de recursos hídricos de aguas superficiales y subterráneas, por lo que el consumo está relacionado con el volumen de agua que se evapora o se incorpora a un producto.
El componente verde es el volumen de agua de lluvia consumida, que es particularmente relevante en la producción de cultivos.
El componente gris es un indicador del grado de contaminación del agua dulce y se define como el volumen de agua dulce que se requiere para asimilar la carga de contaminantes según los estándares de calidad del agua ambiental existentes.
En el siguiente mapa se puede apreciar el balance de agua virtual de cada país y los principales flujos internacionales brutos de agua virtual. Los países que aparecen en verde tienen un balance negativo es decir que tienen exportaciones netas de agua virtual, mientras que los países marcados con tonos amarillos, anaranjados y rojos tienen importaciones netas.
Los mayores exportadores netos se encuentran en América del Norte y América del Sur:
- Estados Unidos,
- Canadá,
- Brasil y
- Argentina.
En Asia Meridional:
- India,
- Pakistán,
- Indonesia,
- Tailandia, y
- Australia.
Los mayores importadores netos son:
- África del norte y Oriente Medio,
- México,
- Europa,
- Japón, y
- Corea del Sur.
La cuantificación y el mapeo de la huella del agua nacional ha sido un campo de estudio en evolución desde la introducción del concepto a principios del milenio, y cobra vital importancia conforme las empresas y las personas se consientizan y se involucran tomando medidas que aporten soluciones a los problemas medioambientales que aquejan sobre todo a las personas de los países en desarrollo.
Un ejemplo de estas medidas son las tomadas por el banco BNP Paribas que ha decido no financiar a las empresas europeas que compren soja y carne de res de zonas taladas de la amazonia brasileña por considerar que ambos producos son dos de las mayores causas de la destrucción de la selva amazónica.
Algunas otras han decidido cambiar sus procesos productivos como Unilever que involucra ahorro de agua o Coca-Cola, Dell, Volvo, entre otros que han introducido el uso de materiales amigables con el medio ambiente.
Para la OMC, el desarrollo sostenible y la protección y preservación del medio ambiente son objetivos fundamentales y se encuentran consagrados en el Acuerdo de Marrakech, por el que se estableció la Organización.
La respuesta a la pregunta ¿si se puede ahorrar agua gracias al comercio? Es sí, siempre y cuando se tenga en mente que la sostenibilidad implica una nueva forma de pensar y actuar, y que el agua es un recurso estratégico para el desarrollo económico, social y sobre todo para la vida.
Bibliografía
• Arjen Y. Hoekstra and Mesfin M. Mekonnen (2011). The water footprint of humanity. En línea. Disponible en https://www.pnas.org/content/109/9/3232. Accesado el 20 de marzo de 2021.
• Parada – Puig, Gabriela El agua virtual: conceptos e implicaciones. Orinoquia [en linea]. 2012, 16(1), 69-76[fecha de Consulta 23 de Marzo de 2021]. Disponible en: https://www.redalyc.org/articulo.oa?id=89625076001
• Organización Mundial del Comercio (OMC) (2021). Curso Comercio y Medio Ambiente en la OMC. Módulo I.
• UNEP (2004) Lineamientos para la aplicación del enfoque ecosistémico a la gestión integral del recurso hídrico. (PNUMA). En línea. Disponible en: https://www.ucipfg.com/Repositorio/MGAP/MGAP-11/semana1/andrade01.pdf. Coonsultado el 2 de marzo de 2021
• Hoekstra AY. 2003. Virtual Water. An Introduction. En: Virtual Water Trade. Proceedings of the International Expert Meeting on Virtual water Trade. Value of Water Research Report Series No. 12. Delft, The Netherlands: UNESCO-IHE Institute for Water Education. p. 13- 23.
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